Niños...
Creaturas
que en sus inicios son indescifrables, se aferran al llanto, muchas veces no se
puede comprender con claridad lo que necesitan, la desesperación los vuelve
irritables. Sin embargo, cuando ríen
pueden desarmar con su risa y con su carita de ángel, pueden establecer un
contacto muy fuerte con los adultos… La inocencia de los niños es realmente
sorprendente y con un par de palabras pueden construir un mundo a su alrededor
y del llanto sacar una carcajada.
Crecemos
y nos volvemos adultos, pero muchos no olvidamos esa niñez que llevamos por
dentro, ese ser interior que sale muchas veces y nos hace recordar taaantas
cosas hermosas, como esa canción del mish… mish… mishito mío caza ratones por
los rincones…. Jejejej a… verdad que se acordaron????
Comentarios
Publicar un comentario