DULCE

Dulce soledad disfrazada de fantasía, palabras ensanchadas de injusticia perenne, dulces recuerdos infestados de veneno.  El final llegó sacando la casta de la que estabas hecho, insulso y ciego perdió la cordura insultando lo más sagrado que en semilla ingresó en su seno. No pudo ahorrar palabras y tragarlas con recelo, las afirmó la furia y las desplegó sin sosiego.  Pero no hay crimen sin castigo, ni gota que no pueda rebalsar un vaso.  No será una joya a la que se tenga derecho, no será un ángel que le demuestre desprecio, será un inocente con respiro y con anhelos, a quien le fue arrebatada la sonrisa y solo encontró en su mirada el desprecio.

Pero aún queda el amor que fue pisoteado y rechazado como olvido en el desecho, quedó el amor que aún persiste sin mirar atrás, solo queda el amor de madre en medio de la adversidad fortaleciéndose con cada respiro, con cada minuto que pasa ante la sencillez y ternura que encuentra en el vientre materno, ante el crecimiento del inocente, ante la calidez de su amor ciego.  Qué puede valer más un corazón lleno de odio que se oculta ante las sombras o un corazón que perdido encontró desprecio, no se busca una respuesta, no se busca una sentencia que de pie a lo inaudito, se busca paz, se busca tranquilidad, se busca amor que supere el ensueño.